Martin Cooper: Inventor del teléfono móvil🕒 Tiempo estimado: 3 minutos de lectura
¿Quién inventó el teléfono móvil? Érase una vez un mundo sin teléfono celular. Y hubo otra época posterior, no tan lejana, en la que unos aparatos, ahora pequeños y ligeros, pesaban alrededor de un kilo y tenían prácticamente el tamaño de una regla escolar.
La humanidad ha añorado los dispositivos de comunicación inalámbrica desde principios del siglo XX, especialmente en periodos de conflictos de guerra. Pero no fue hasta el 3 de abril 1973, mientras trabajaba para Motorola, que un tipo llamado Martin Cooper revolucionaría el mundo para siempre. Cooper decidió que era hora de crear un dispositivo portátil que pudiera usarse para hacer llamadas telefónicas desde cualquier lugar. ¡Y así nació el primer teléfono móvil!
Martin Cooper, por ejemplo, fue el responsable de liderar el equipo que creó el Dyna Tech, el primer dispositivo portátil, que pesaba poco menos de un kilo y medía 25 centímetros. La primera demostración del sistema tuvo lugar en abril de 1973 en Nueva York. El ingeniero no quedó satisfecho con la idea, que dejaría a la gente “pegada” a los vehículos. Después de la primera demostración pública del teléfono celular, el dispositivo fue considerado un éxito.
Aunque el mérito es atribuido hoy a Martin Cooper hubo un predecesor algo más desconocido y lejano. Fue Nathan Stubblefield, un agricultor estadounidense de Kentucky, quien habría comenzado a trabajar en su creación en 1891. El dispositivo desarrollado por Stubblefield tenía el tamaño de un bote de basura y llegaba a alcanzar los 800 metros. Su intención era establecer contacto entre las residencias, que entonces estaban muy distantes entre sí. En 1892 habría hecho una demostración pública, con música y transmisión de diálogos a cinco receptores.
El prototipo utilizado para la primera llamada pesaba 1,1 kg y medía 22,5 cm de largo. Este dispositivo arcaico solo funcionó durante 30 minutos, pero requirió 10 horas para recargar su batería. Era como un ladrillo pesado y grande, con una batería de escaso rendimiento, y solo se podía hacer una llamada antes de que se agotara. Pero bueno, ¡era un comienzo!
Después de años de trabajo en Motorola, Cooper decidió fundar otra empresa para continuar con su investigación en el campo de la comunicación portátil, ArrayComm.
Cooper aún tiene mucha lucidez tras más de nueve décadas de vida. Como profesional en el campo, se mantiene conectado con el mercado de telefonía celular y tiende a tener siempre a mano los últimos lanzamientos.
Cooper ha afirmado que no es fanático de los teléfonos inteligentes actuales debido a su formato. Señaló que la estructura recta de los dispositivos no coincide con la curvatura de la cabeza y es incómodo en las manos.
Para Martin Cooper, el universo de los móviles plegables tampoco es la solución. En un discurso realizado por el padre del celular entiende que el nuevo formato presenta hermosa ingeniería pero no resuelve nuevos problemas.
Hoy en día, gracias a ese primer invento, todos tenemos en nuestros bolsillos un pequeño ordenador capaz de cosas sorprendentes.