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¿Qué son los seres vivos?🕒 Tiempo estimado: 6 minutos de lectura

Se calcula (estos científicos que lo miden todo) que la vida en la Tierra comenzó hace unos 3500 millones de años, probablemente con cianobacterias. Pero, ¿qué son los seres vivos? Los seres vivos son como la fauna y flora que te encuentras por ahí. Son bichitos y plantitas que tienen vida, que respiran, comen y se reproducen. Así es, pueden ser animales, plantas, hongos o bacterias, y todos tienen algo en común: están compuestos por células.

Las células son como los ladrillos que construyen a los seres vivos, son como una casita de legos pero microscópica. ¡Y no es solo una célula, no señor! Los seres vivos pueden tener muchas células, como si fueran un gran edificio lleno de ladrillos.

Los seres vivos también tienen necesidades básicas, como tú y yo. Necesitan alimentarse para tener energía, respirar para obtener oxígeno y eliminar desechos, como cuando te comes un buen bocadillo y después tienes que ir al baño. Y claro, para asegurarse de que su especie no se extinga, ¡también necesitan reproducirse!

Hay de todo tipo de seres vivos: unos que se arrastran por el suelo, otros que vuelan por el cielo, y otros que nadan en el agua. También hay algunos que son muy grandes y otros que son muy pequeños, ¡pero todos son especiales y únicos!

Y no te olvides de que los seres vivos tienen su lugar en el mundo. Todos forman parte de un ecosistema, ¡y cada uno tiene un papel importante! Por ejemplo, algunos se comen a otros, y otros ayudan a polinizar las flores para que crezcan más plantitas.

¡Así que ya sabes! Los seres vivos son algo muy especial y diverso. Son como una gran familia de plantas y animalitos, ¡y cada uno tiene su propia personalidad!

¿Qué es necesario para considerar que un ser vivo es un ser vivo?

Podemos definir a los seres vivos por la presencia de algunos atributos indispensables:

  1. Están formados por células;

Las células son las unidades estructurales y funcionales de los seres vivos. Las células son la unidad básica de la vida. Son como las piezas que forman un rompecabezas, pero en este caso, el rompecabezas se convierte en un ser vivo. Hay dos tipos de células: las procariotas, que son más simples y no tienen un núcleo bien definido, y las eucariotas, que son más complejas y sí tienen un núcleo.. Pueden estar formados por una sola célula (unicelulares) o por muchas (pluricelulares).

Los seres vivos tienen necesidades básicas que deben cumplir para mantenerse con vida. Estas necesidades son: alimentación, respiración, reproducción y eliminación de desechos. La alimentación es necesaria para obtener los nutrientes que necesitan, la respiración para obtener el oxígeno y eliminar el dióxido de carbono, la reproducción para asegurar la supervivencia de la especie, y la eliminación de desechos para mantenerse limpios y saludables.

Los seres vivos se clasifican según ciertas características que comparten. La clasificación más básica es la de los cinco reinos: Monera, Protista, Fungi, Plantae y Animalia. Dentro de cada reino hay diferentes grupos, que se clasifican según su morfología, fisiología y genética.

Los seres vivos también tienen adaptaciones, que son características que les permiten sobrevivir en su entorno. Por ejemplo, las cebras tienen rayas para camuflarse en la sabana, los pingüinos tienen plumas especiales para mantenerse calientes en el frío antártico, y los camaleones pueden cambiar de color para confundirse con su entorno.

Además, los seres vivos forman parte de un ecosistema, que es una comunidad de seres vivos que interactúan entre sí y con su entorno. Cada ser vivo tiene un papel importante en el ecosistema, y cualquier cambio en uno puede afectar a los demás.

2. Requieren energía para llevar a cabo su metabolismo;

Las células se consideran unidades funcionales, ya que en ellas tienen lugar una serie de reacciones químicas imprescindibles para la supervivencia de los organismos. Este conjunto de reacciones se denomina metabolismo. La regulación de estas reacciones es fundamental para que el organismo responda rápida y eficazmente a los cambios ambientales y fisiológicos.

Hay dos tipos de reacciones metabólicas:

  • Catabólica (o degradación): consiste en liberar energía al descomponer moléculas complejas en simples. Ejemplo de esta reacción es la respiración celular. La energía liberada en estas reacciones es esencial para realizar trabajo en la célula, como el movimiento celular.
  • Anabólicas (o de síntesis): consumen energía para transformar moléculas simples en compuestos. Ejemplo de esta reacción es la síntesis de proteínas.

3. Responder a los estímulos;

Tanto los animales como las plantas son sensibles a la información que reciben del entorno y reaccionan ante ella. Por ejemplo: Las plantas crecen hacia la luz (fototropismo).

4. Presentan material genético;

Todos los seres vivos tienen ADN (ácido desoxirribonucleico) como material genético. El ADN lleva la información que programa todas las actividades celulares y se transmite a las siguientes generaciones en forma de genes.

5. Se reproducen;

Los seres vivos son capaces de dar lugar a nuevos seres. Esto ocurre por el proceso de reproducción. Hay dos tipos de reproducción:

  • Reproducción sexual: involucra gametos y, en consecuencia, presenta variabilidad genética;
  • Reproducción asexual: sin participación de gametos.

6 Evoluciona.

La evolución de los seres vivos es consecuencia de la acumulación de cambios que se producen en los organismos a lo largo de generaciones. Cuando estos cambios favorecen la supervivencia del individuo, son seleccionados por el mecanismo de selección natural y transmitidos a su descendencia.

Con todo esto esperamos que ya sepas mejor lo que son los seres vivos y lo que no son seres vivos. Por ejemplo, las plantas de plástico o las mascotas robot pueden parecer vivas, pero en realidad no lo son. Es como si fueran impostores de la vida, ¡como si se hicieran pasar por seres vivos cuando en realidad no lo son! También puede haber confusión con ciertos objetos que tienen movimiento, como las hojas que se mueven con el viento o las olas del mar. ¡Parece como si tuvieran vida propia, pero en realidad es el resultado de las fuerzas naturales que actúan sobre ellos! Y no te dejes engañar por la Disney, ¡Pinocho tampoco es un ser vivo!

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