The Last Kingdom es una serie de televisión histórica ambientada en el año 872, cuando muchos de los reinos que conforman la Inglaterra actual cayeron en manos de los vikingos. Bajo el rey Alfredo el Grande, el Reino de Wessex es el único que resiste los ataques. La serie mezcla personajes reales que forman parte de la historia con hechos y personajes ficticios. Es un drama histórico medieval basado en las novelas The Saxon Stories de Bernard Cornwell.

La serie épica presenta varias figuras importantes en la historia británica, con muchos personajes de la vida real, aunque gran parte es ficción. La producción sigue al joven Uhtred, un noble que perdió a sus padres en una de las incursiones vikingas.

Tomado y criado por ellos, el niño crece para convertirse en un guerrero. Más tarde, emprende una misión para conquistar las tierras donde nació. Mientras tanto, el rey Alfred enfrenta problemas políticos y religiosos para unificar los reinos y transformarlos en lo que ahora es Inglaterra.

Uhtred de Bebbanburg

Uhtred, el protagonista, está inspirado en la familia del autor, que se remonta a los gobernantes de Bebbanburg, el actual castillo de Bamburgh. El autor del libro, Cornwell, le dijo a The Guardian cómo descubrió la conexión cuando conoció a su padre biológico, William Outhred, un aviador canadiense que residía en el Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial.

“Tenía un árbol genealógico que se remontaba al siglo VI. Eran los Señores de Bebbanburg (Castillo de Bamburgh) en Northumberland y había un Uhtred».

Aunque el personaje de Uhtred es una persona real, los hechos de su vida son obras de ficción. Dicho esto, la mayoría de los eventos principales de los que el personaje forma parte en la serie fueron reales, al igual que muchas de las figuras históricas que encontró.

Rey Alfredo de Wessex

Alfredo, nacido en 849, asumió el trono de Wessex en 871 tras la muerte del rey Æthelred, el tercero de sus hermanos mayores en gobernar el reino. Es conocido como uno de los reyes más importantes de Inglaterra.

Ya era un veterano de varias campañas contra los vikingos y los primeros años de su reinado se caracterizaron por continuos conflictos con los ejércitos nórdicos.

En 878, Wessex era el único reino inglés que aún resistía al «Gran Ejército Pagano» después de que Northumbria, East Anglia y Mercia cayeron ante los invasores.

Alfred se vio obligado a huir con sus fuerzas fangosas restantes a los pantanos de Somerset, el escenario de una de las leyendas perdurables de su reinado. Esto se muestra en la serie.

El rey Alfredo de Wessex incluso sufrió problemas de salud. Hay suficiente evidencia para afirmar que Alfred padecía problemas de salud crónicos. Además, Alfred buscó unir los reinos ingleses en una Inglaterra unificada.

El rey de la vida real era famoso por su entusiasmo por la iglesia y el aprendizaje, expandiendo la construcción de escuelas en el reino. Además, su apoyo a la iglesia jugó un papel clave en el cultivo de su reputación como gobernante, lo que ha llevado a los historiadores a asignarle el epíteto de “el grande” siglos después de su muerte.