La muerte de Tutankamón🕒 Tiempo estimado: 9 minutos de lectura
Hace unos 3.000 años, en Egipto, había un faraón joven y guapo llamado Tutankamón, el “Niño Faraón”. Él era famoso por ser el faraón más joven en gobernar Egipto y también por tener un montón de oro y joyas chulas.
Tutankamón, también conocido como el “Niño Faraón”, nació en 1346 antes de Cristo y murió en 1327 antes de Cristo, a los 19 años. Fue faraón del Antiguo Egipto entre los años 1336 y 1327 antes de Cristo Era hijo del faraón Akhenaton.
Pero a pesar de que se convirtió en faraón a la tierna edad de nueve años, no logró hacer mucho en su corta vida. De hecho, la mayoría de la gente solo lo recuerda por su muerte misteriosa y mal manejada. Un día, Tutankamón tuvo una herida en su pierna y, por desgracia, se infectó. Los médicos de la época hicieron todo lo posible para salvarlo, pero como no tenían antibióticos ni medicamentos modernos, no pudieron hacer mucho. Murió por lo que hoy en día se habría tratado fácilmente con un poco de antibiótico. En esa época, la medicina no era tan avanzada y los médicos de Tutankamón eran más parecidos a charlatanes con trajes elegantes; algo así como nos sucede con los vendedores de cursos hoy en día pero en el ámbito de la salud.
Tristemente, Tutankamón murió a la edad de 19 años y fue enterrado en una que parecía haber sido diseñada por un principiante en Minecraft pero llena de riquezas. Pero aquí viene el fiasco histórico: su tumba fue olvidada y enterrada bajo la arena durante más de 3.000 años, hasta que fue descubierta por casualidad en 1922. Durante todo ese tiempo, el oro y las joyas de Tutankamón se quedaron ahí, esperando a ser descubiertas. Es como perder tu cartera y encontrarla 3.000 años después, con todas tus tarjetas de crédito todavía adentro.
La importancia atribuida a este faraón está relacionada con el hecho de que su tumba, ubicada en una pirámide en el Valle de los Reyes, fue encontrada intacta. En él, el arqueólogo inglés Howard Carter encontró, en 1922, una gran cantidad de tesoros. El cuerpo momificado de Tutankamón también estaba en la tumba, dentro de un sarcófago, cubierto con una máscara mortuoria dorada. El ataúd que contenía la momia del faraón también está hecho de oro macizo.
Se encontraron más de 5.000 piezas en la tumba de Tutankamón. Entre los objetos se encontraban joyas, objetos personales, adornos, jarrones, esculturas, armas, etc.
Durante la excavación de la tumba de Tutankamón, algunos trabajadores del equipo murieron inesperadamente. Entonces se creó la leyenda de la Maldición del Faraón. En la pared de la pirámide se encontró una inscripción que decía que quien perturbara el sueño eterno del faraón moriría. Sin embargo, más tarde se descubrió que algunas personas habían muerto después de respirar hongos mortales que se concentraron dentro de la pirámide.
La vida de Tutankamón antes de su muerte
En aquellos tiempos, el joven Tutankamón ascendió al trono a la tierna edad de nueve años. A esa edad yo todavía estaba tratando de descifrar cómo funcionaba el botón de encendido de la televisión., ¿qué podrías hacer tú? Probablemente nada, pero él tenía que gobernar todo un imperio. Afortunadamente, contaba con la ayuda de su esposa, Ankhesenamón, quien además de ser su consorte, también era su hermana. Todo quedaba en familia.
A pesar de su juventud, Tutankamón se casó con su media naranja, Ankhesenamón. Pero no te dejes engañar por su amor romántico: la unión matrimonial también era una forma de mantener el poder en la familia real. Si bien no sabemos si compartían el mismo cepillo de dientes, sí sabemos que Ankhesenamón era hija de Nefertiti, la esposa principal del faraón Akenatón, que era el padre de Tutankamón.
Pero la vida de Tutankamón no fue un camino de rosas. A la edad de 19 años, murió de una infección en la pierna. ¿Cómo un faraón tan importante podría haber muerto de una enfermedad tan común? Los científicos han especulado que una fractura en su pierna podría haber sido la causa de la infección, o tal vez una picadura de mosquito. ¿Un faraón tan poderoso muriendo por una picadura de mosquito? ¡Vaya fiasco histórico!
Sin embargo, su muerte temprana ha llevado a la creación de numerosas teorías conspirativas, algunas de las cuales sugieren que fue asesinado. Pero bueno, siempre habrá teorías locas sobre la muerte de los famosos.
El descubrimiento de la tumba de Tutankamón
Un grupo de arqueólogos decidió inspeccionar la zona del Valle de los Reyes y buscar algún tesoro perdido. Movidos por el espíritu de Indiana Jones, entre la arena y las rocas, se encontraron con una entrada secreta que los llevó a lo más profundo de la tierra.
De repente, ¡sorpresa! Se encontraron con la tumba de Tutankamón. Hasta el mismísimo faraón quedó sorprendido. Al principio, pensaron que era un lugar más en el que no encontrarían nada interesante. Pero, oh sorpresa, se encontraron con un tesoro de incalculable valor: momias, tesoros, oro, joyas, objetos sagrados y todo lo que puedas imaginar. Vaya caza del tesoro.
La emoción y la alegría fueron tan grandes que los arqueólogos no sabían si llorar, reír o hacer una fiesta sobre aquel lugar. Pero lo que más importaba era la importancia del hallazgo para la historia de Egipto. Fue un auténtico desastre histórico que alguien de talla del pequeño señor Tutankamón hubiera pasado desapercibido durante tanto tiempo. Gracias a ese hallazgo, hemos aprendido mucho más sobre la historia de Egipto y sus antiguas costumbres.
Los análisis médicos sobre la muerte de Tutankamón
Resulta que en un principio se pensaba que Tutankamón había sido asesinado con un garrote, es decir, le cogieron a garrotadas como en las películas de mafiosos o como cuando tu mamá te perseguía por toda la casa con la zapatilla y está producía alguna contusión. Pero luego llegaron unos médicos modernos con batas y herramientas y dijeron que eso no tenía ningún sentido.
Así que decidieron hacer un análisis de los restos óseos del faraón. ¿Qué encontraron? ¡Una fractura en el cráneo! ¿Qué significa esto? Pues que alguien lo había golpeado en la cabeza, ¡tal vez con un garrote otra vez pensaron!
Pero, espera un momento, resulta que esa fractura podría haber sido causada por la caída de una vasija en la cabeza de Tutankamón, pues alguien no hizo bien su trabajo al colocar sus pertenencias allí y decidió callarse, mejor dicho, llevarse su secreto a la tumba.
Pero la historia no termina ahí, porque los médicos también descubrieron algo increíble: Tutankamón tenía una infección en la pierna. ¡Ay, qué dolor! Y es que según parece, la infección se había extendido por todo su cuerpo y fue lo que finalmente acabó con su vida. Y no era nada insalvable pero no encontraron medicamentos en la farmacia del Antiguo Egipto que pudiera resolver el problema.
Así que la verdadera causa de la muerte de Tutankamón fue una pierna infectada, ¡no un garrote ni una vasija! Pero vamos, que eso no quita que haya sido una historia llena de giros y vueltas.
El tratamiento médico en el antiguo Egipto
En aquellos días, si tenías dolor de cabeza, no tenías que preocuparte por el paracetamol o el ibuprofeno. ¡No señor! Simplemente tomabas un poco de excremento de cocodrilo y te lo aplicabas en la cabeza. Sí, ¡excremento de cocodrilo! ¡Una solución muy… interesante!
Los sacerdotes egipcios eran los médicos de la época, y tenían su propia visión única de la medicina. En lugar de hacer un examen médico, se basaban en la lectura de los sueños y la interpretación de los síntomas. «¿Te duele la cabeza? Eso significa que hay un demonio viviendo dentro de ti». Y así, te realizaban un ritual para expulsar al demonio y te mandaban a casa con el alta.
Tal vez te preguntes si Tutankamón recibió tratamiento médico. Bueno, la respuesta es que sí. Los arqueólogos encontraron en su tumba un estuche de medicinas con varios ungüentos y remedios. Pero la verdad es que si alguna vez Tutankamón necesitó un médico, no sabemos si se aplicaba excremento de cocodrilo o si se le expulsaba demonios. ¡La medicina egipcia era muy salrecorrido!
La importancia de la muerte de Tutankamón para la historia de Egipto
Su muerte aceleró el declive del gran Imperio. Resulta que los médicos del antiguo Egipto no tenían todo bajo control y se les escapó de las manos la situación ante el gran faraón. Se sabe que utilizaban remedios naturales para tratar las enfermedades, como por ejemplo, la miel para las heridas, la cebolla para los resfriados, y la excreción de cocodrilo para las quemaduras. Pero nada de eso serviría contra la infección del joven faraón.
Pero, a pesar de su corta vida, Tutankamón se convirtió en uno de los faraones más famosos de la historia de Egipto y aunque no pudo hacer tanto por su pueblo sí que nos facilitó las cosas para entender el Antiguo Egipto. Gracias a su tumba hemos descubierto:
- Que les gustaba mucho el oro y las joyas, porque había un montón de ellas en su tumba.
- Que los faraones eran muy importantes y se rodeaban de lujos, porque había camas, sillas y otros objetos de oro y piedras preciosas en su tumba.
- Que los egipcios creían en la vida después de la muerte, porque habían colocado objetos personales y ofrendas para Tutankamón en su tumba.
- Que el arte egipcio era muy detallado y lleno de simbolismo, porque las paredes de la tumba de Tutankamón estaban decoradas con jeroglíficos y pinturas muy elaboradas.
- Y, por supuesto, hemos aprendido mucho sobre la vida y la muerte de Tutankamón, y cómo era la vida en el antiguo Egipto.