Alcanzar la excelencia🕒 Tiempo estimado: 3 minutos de lectura

Todo lo que quieres en la vida, puedes tenerlo. No tuviste todo lo que quisiste en la vida, pero no te permitas poner excusas para no ir por ello. No estás contento con lo que querías. El mañana podría no existir. Sí, el mañana es reconfortante, y cuando llega, es un regalo. Tenemos la bendición de hoy. Si ustedes no empiezan a creer en sí mismos, su vida no significará nada para nadie. Nadie va a seguir a alguien que no cree en sí mismo. Nadie va a ayudarte, chicos. Tienen que ayudarse a sí mismos. No dejen que lo que no pueden hacer en el momento interfiera con lo que saben que pueden hacer.

Cuando eres tenaz y crees en ti mismo, ese deseo se transforma en acción, caminos hacia un legado duradero. Escuchen la voz de su interior, la energía que les dice que pueden ser más de lo que son ahora. Donde hay limitaciones, excusas, energía negativa, es allí donde debe brillar un alto voltaje de positividad. El esfuerzo interno, las reglas inquebrantables, salen a la luz para ser recordadas. Manténganse en su camino; los fracasos o éxitos de alguien más no definen lo que ustedes son. Los sueños impulsan, y la palabra clave es «impulsan». Todo depende de ustedes.

Lo que hacemos repetidamente cada día, por lo tanto, la excelencia hacia la que nos esforzamos cada día. El peso de ese esfuerzo constante, empujando hacia adelante, dándolo todo en el entrenamiento cada día, esforzándonos por la excelencia. Somos lo que hacemos repetidamente; por lo tanto, la excelencia no es un acto, sino un hábito. No es un accidente, sino algo que sucede a propósito. Para crecer, debes fracasar hasta el punto de agotamiento y luego ir más allá. Ahí es donde está el crecimiento. El crecimiento es fracaso, el éxito es fracaso. El verdadero éxito es cuando fracasas y, sin embargo, fracasas de nuevo, y aún así fracasas una vez más sin perder el entusiasmo. De fracaso en fracaso, sin perder nunca la esperanza.

No necesitas ir a dormir para empezar un nuevo día; puede comenzar justo ahora. Sé egoísta aquí. Si lo quieres todo, consíguelo todo. Una vez que tengas ese impulso, corre, no lo sueltes tan rápido. No te confundas con el dolor, no seas débil. Si sientes el dolor, estás concentrándote en él, estás enfocado en la energía negativa. Enfócate en la respuesta positiva al dolor. Ese dolor es como saber que estás arreglando algo que es insuficiente en tu vida. Lo que sientes hoy te proporciona la paz que disfrutarás mañana. El dolor es temporal, el orgullo es para siempre, chicos. Si lo das todo, lo obtienes todo, y con creces.

La pieza de bienes raíces más valiosa no es la casa en la que pones una llave en la cerradura, sino tu cuerpo. Es la casa en la que te ves obligado a vivir por el resto de tu vida. No puedes venderla, no hay ejecución hipotecaria, no puedes hacer una venta rápida. Todo lo que puedes hacer es modificarla y mejorarla, o puedes deteriorarla. Puedes disfrutarte a ti mismo. La gente pone demasiado esfuerzo en el gimnasio, ya sabes, quizás una hora entera cada día. No, creo que simplemente seguiré viviendo en las calles de la vida, en lugar de en las mansiones. Qué ayuda vivir en ellas, entonces, si eso te ayuda a vivir.