📙 Significado de Líquido🕒 Tiempo estimado: 4 minutos de lectura
Un líquido es un estado de la materia en el que las moléculas se encuentran más separadas que en el estado sólido, pero más unidas que en el estado gaseoso. Esto hace que los líquidos tengan una forma variable, que se adapta al recipiente que los contiene, pero un volumen constante, que no depende de la presión o la temperatura.
Los líquidos tienen una serie de características y propiedades que los diferencian de los otros estados de la materia. Algunas de estas son:
- Viscosidad: es la resistencia de un líquido a fluir o deslizarse. Depende de la fuerza de atracción entre las moléculas y de la temperatura. A mayor atracción o menor temperatura, mayor viscosidad. Por ejemplo, la miel es más viscosa que el agua.
- Tensión superficial: es la fuerza que actúa sobre la superficie de un líquido, manteniéndola unida y minimizando su área. Depende de la cohesión entre las moléculas y de la temperatura. A mayor cohesión o menor temperatura, mayor tensión superficial. Por ejemplo, el agua tiene una alta tensión superficial que le permite formar gotas o sostener objetos pequeños.
- Capilaridad: es la capacidad de un líquido de ascender o descender por un tubo fino o por los poros de un material, debido a la combinación de las fuerzas de cohesión (entre las moléculas del líquido) y de adhesión (entre el líquido y el material). Por ejemplo, el agua sube por las raíces de las plantas o por una toalla mojada.
- Evaporación: es el proceso por el cual algunas moléculas de la superficie de un líquido adquieren suficiente energía para escapar y pasar al estado gaseoso. Depende de la presión, la temperatura y el área superficial del líquido. A mayor presión o menor temperatura o área, menor evaporación. Por ejemplo, el agua se evapora más rápido en una olla caliente que en un vaso frío.
¿Cómo se forma un líquido?
Un líquido se puede formar a partir de un sólido o de un gas, mediante los procesos de fusión o condensación, respectivamente.
- Fusión: es el proceso por el cual un sólido se transforma en líquido al aumentar su temperatura hasta alcanzar el punto de fusión. En este punto, las moléculas del sólido adquieren suficiente energía para vencer las fuerzas que las mantienen fijas y ordenadas, y pasan a tener mayor libertad y desorden. Por ejemplo, el hielo se funde en agua al llegar a 0°C.
- Condensación: es el proceso por el cual un gas se transforma en líquido al disminuir su temperatura hasta alcanzar el punto de condensación. En este punto, las moléculas del gas pierden energía y se acercan entre sí, formando enlaces débiles que las mantienen unidas pero no fijas. Por ejemplo, el vapor de agua se condensa en gotas al enfriarse.
Dato curioso: Existen algunas sustancias que pueden pasar directamente del estado sólido al gaseoso sin pasar por el estado líquido. Este fenómeno se llama sublimación y ocurre cuando la presión es muy baja o la temperatura es muy alta. Por ejemplo, el hielo seco (dióxido de carbono sólido) se sublima al entrar en contacto con el aire.
¿Qué tipos de líquidos existen?
Los líquidos se pueden clasificar según su composición en:
- Líquidos puros: son aquellos que están formados por una sola sustancia y tienen propiedades físicas y químicas definidas e invariables. Por ejemplo, el agua destilada o el mercurio.
- Líquidos mezclados: son aquellos que están formados por dos o más sustancias y tienen propiedades físicas y químicas variables y dependientes de la composición. Por ejemplo, el agua de mar o el alcohol etílico.
Los líquidos mezclados se pueden subdividir en:
- Soluciones: son líquidos mezclados que tienen una composición homogénea, es decir, que no se distinguen sus componentes a simple vista o con un microscopio. Por ejemplo, el agua con azúcar o el vinagre.
- Coloides: son líquidos mezclados que tienen una composición heterogénea, es decir, que se distinguen sus componentes con un microscopio pero no a simple vista. Por ejemplo, la leche o la sangre.
- Suspensiones: son líquidos mezclados que tienen una composición heterogénea, es decir, que se distinguen sus componentes a simple vista y con un microscopio. Por ejemplo, el agua con arena o el aceite con agua.
Dato curioso: Existen algunas sustancias que pueden estar en estado líquido a temperaturas muy bajas o muy altas, fuera del rango habitual de los líquidos. Estas sustancias se llaman líquidos anómalos y tienen propiedades físicas y químicas muy particulares. Por ejemplo, el helio líquido puede alcanzar temperaturas cercanas al cero absoluto (-273°C) y fluir sin resistencia ni viscosidad.