Fugas de prisión más Increíbles de la Historia🕒 Tiempo estimado: 3 minutos de lectura
Las fugas de prisión siempre han fascinado al público, ya sea por su astucia, valentía o ingenio. Aquí te presento cinco de las fugas de prisión más audaces en la historia.
Grandes fugas de prisión
William Maxwell – Torre de Londres (1716): En el siglo XVIII, William Maxwell, el quinto conde de Nithsdale, fue encarcelado en la Torre de Londres por su participación en la rebelión jacobita de 1715. A punto de ser ejecutado en 1716, su esposa Winifred lo visitó en prisión y le entregó ropa de mujer. Maxwell se disfrazó de mujer y logró escapar de la Torre de Londres, posteriormente llegó a Italia y se reunió con su esposa en Roma.
Fuga masiva – Prisión de Libby (1864): Durante la Guerra Civil estadounidense, la prisión de Libby en Richmond, Virginia, estaba superpoblada y plagada de enfermedades. Los prisioneros cavaron un túnel de escape de 50 pies de largo bajo la prisión y 109 de ellos lograron escapar. De estos, 59 llegaron a tierras de la Unión, 48 fueron capturados, y 2 se ahogaron en el río James.
John Dillinger – Cárcel del condado de Crown Point (1934): John Dillinger, un famoso ladrón de bancos de la década de 1930, fue arrestado en Lima, Ohio, en 1933. Sin embargo, logró escapar de la cárcel del condado de Crown Point en Indiana en marzo de 1934. Utilizó un arma falsa hecha de una tabla de lavar tallada para amenazar a los guardias y luego robó un coche.
Clarence Anglin, John Anglin y Frank Morris – Alcatraz (1962): En 1962, tres prisioneros, Frank Morris y los hermanos Clarence y John Anglin, llevaron a cabo una fuga planeada durante mucho tiempo en la famosa prisión de Alcatraz. Cavaron agujeros en las paredes de sus celdas, se deslizaron a través de los conductos de ventilación y construyeron una balsa improvisada para escapar. Se presume que se ahogaron al intentar cruzar la Bahía de San Francisco.
La fuga de Joaquín Guzmán Loera, conocido como ‘El Chapo’, de la prisión del Altiplano en 2015 es una de las fugas más notorias en la historia de las prisiones. El Chapo, un poderoso narcotraficante mexicano y líder del cartel de Sinaloa, ya había escapado de prisión una vez antes. Después de ser arrestado en 1993, El Chapo fue condenado a 20 años de prisión en México. Sin embargo, continuó operando su imperio criminal desde el interior de la prisión, sobornando a personal penitenciario para obtener privilegios especiales. En 2001, El Chapo logró su primera fuga de prisión, y se cree que un guardia lo sacó de la cárcel en un carrito de lavandería. Durante más de una década, permaneció prófugo hasta que fue recapturado en 2014 y enviado a la prisión del Altiplano, considerada una de las más seguras de México. Sin embargo, el 11 de julio de 2015, El Chapo logró escapar nuevamente. Se deslizó por un agujero bajo la ducha de su celda y huyó a través de un túnel que había sido excavado por sus cómplices. Este túnel estaba equipado con iluminación y ventilación, lo que sugiere una cuidadosa planificación. Finalmente, las autoridades lograron recapturarlo en 2016. Esta fuga destacó la audacia y la ingeniería detrás de la evasión de El Chapo de una prisión de máxima seguridad